Uuuuhhhhhh soy una Brie fantasmaaaaa uuuuuhhhhhh, soy el espíritu de Glenda y vengo a cerrar de una vez este blog uuuuhhhhhhhhh.
No me dais más que disgustos, que lo sepais. Que me voy unas semanas para estar tranquila para la eternidad y enseguida os ponéis lloricas y mariquitusos (eso va por el Gafapasta, quede claro), os atacáis de intensidad y parece que he estado yo en vez de Living La Vida Loca y poniéndome de capón como el kiko y de Valentinos hasta el chirimiri lanquideciendo por las esquinas como un melodrama de Douglas Sirk. Y no lo voy a consentir, que no y que no.
Sí cariños, ya sé. Si yo por mí continuaría con el blog y lo cambiaría el título a algo tipo Criaturas celestiales o Pluma de ángel o algo mono por el estilo. Pero es que yo no sé qué pasa por ahí arriba, si no llega el ADSL, si han recortado con la crisis y no lo pagan o si en las alturas no llega el 3G. Pero el caso es que no hay manera de tener actualizado un blog en condiciones. Y tampoco es que tenga yo muchas ganas. Porque entre paseos y siestas con el Chico Guapo, tertulias con Coco (Chanel, of course), cenas con Gianni (Versace, claro, que es pelín barroco pero divertido para un rato), comidas con Balenciaga y pasarelas de primavera, verano, invierno, otoño, y otra vez primavera, pues no me da el tiempo eterno. Ocupadísima me está teniendo el otro barrio, O-Cú-Pa-Dí-Si-Ma. Así, con dos tildes, que echaba yo de menos explayarme yo en modo silábico-expresivo.
Pero claro, decide una darse un garbeo terrenal por las colecciones de París para aparecerme en sueños a Raf Simmons y decirle que pienso llevar toda su colección para Dior de esta temporada de nube en nube porque me flipa que me encanta que me aturde y de paso reírme de los colores ordinarios y chiclosos que ha presentado la bruja de Donatella, que son como para la estrafalaria de la Gin después de una noche por la ruta del tripi, y me encuentro con que han tomado mi blog al asalto un Gafapasta intenso y una Poligonera absurda. Me niego, me niego y me niego (tres veces, como san Pedro y tal).
Lo harán con buenas intenciones, que ya me ha dicho mi amigo Cerbero, que guarda las puertas, que por el Infierno hay muchas intenciones de esas y mucho santurrón barato y que todos los malos y los pérfidos con gracia frivolona estamos arriba, así que quitaros la idea esa tonta de que el Infierno es divertido: el Infierno es un horror, no hay tiendas de alta costura, no hay canapés y te sirven agua de cloaca en vez de los Vodka Sunrise que nos trajinamos el divino uruguayo y yo después de la cena. Y antes de la cena. Y a media tarde, hickksss, y a la hora del aperitivo y a la del desayuno hickss y bueno, ya os hacéis una idea. Sed malos con estilo y al cielo, chicas, chicos, que hay sexo, drogas y piano bar. Que me voy, que tanto vodka y tanto amanecer me poseen. Pues eso, que será con buenas intenciones, pero no pienso dejar que cierren ellos MI blog. ¿Pilláis las mayúsculas? MI blog.
O sea, Gin, bonita, que si te apetece pasear el chándal de tactel a medio culo y cerrar un blog, cierras esa cosa ordinaria que estás escribiendo para contar tonterías banales y redacciones sobre gatos, pero tus patazas con nikes pasados de temporada ni las arrimes por este mundo de glamour, lujo y perversión. Y lo mismo, Gafapasta, que te quiero mucho, pero tiendes a ser más intenso que una Dolorosa Macarena en procesión y más aburrido que Armani. Así que lo mismo, si tienes ganas de colgar cartas de ajuste borras todas tus estupideces y te cantas lo de "láaaaastima que terminóooo el festival de hoooy". Y de paso te echas un chulo bien macarra, bien tatuado y bien eso que te de mala vida y te espabile un poco, que me tienes mártir a mí y mártir y medio al Chico Guapo. Así que dale alegría a tu cuerpo, Macareno, y De-Ja-MI-Blog-En-Paz.
Y ahora sí que sí porque sí. Queda debidamente clausurado este blog como Dior manda, con una buena sonrisa. Y me esfumo por las paredes que he quedado con Audrey para una partida de Canasta, llego tarde y en cuanto te despistas allí las celestiales se han pimplado todo el Pommery y los canapés de solomillo.
Uuuuhhh os quieroooo uhhhhhhhhhh.